La organización territorial interna de la Nueva Vizcaya fue adaptiva y flexible en lo extremo. El número de partidos y la constelación de oficiales cambió frecuentemente: la yuxtaposición y constante reformación de regimenes de misiones, jurisdicciones “tradicionales” de pueblos de indios, de villas, de reales minas, de presidios militares y del mayorazgo de los Cortés del Rey hace casi imposible una reconstrucción fidedigna. La información sobre las jurisdicciones de la Nueva Vizcaya/Durango es tan difícil de interpretar y su número tan poco constante que Navarro Noriega ¹⁾ en su catálogo de curatos de 1814 se rindió y dice que “por falta de constancia auténtica no se expresa el partido a que tocan los curatos en que se ha omitido esta noticia.” También cambian los títulos de los oficiales con frecuencia y es difícil averiguar a qué alcalde mayor o teniente un “justicia mayor” fue subordinado. Alcalde mayor, alcalde, justicia y justicia mayor se usan como títulos casi indiferentemente. tanto documentos de la época como estudios por historiadores (guiados por la documentación erronea de la época, o simplemente omitiendo el importante detalle de “teniente”) llaman “alcalde mayor” a personas que no lo fueron. Hubo individuos localmente poderosos que simplemente pretendían el título de alcalde mayor… Además faltan muchas veces listas de pueblos, haciendas y ranchos de las respectivas jurisdicciones o existen solo para un momento, y cuando se divide una jurisdicción no quedan claro los nuevos límites. Sin embargo, ensayamos una reconstrucción en jurisdicciones, con advertencia que los oficiales no siempre fueron alcaldes mayores y que tanto fechas como la extensión de los territorios están muchas veces muy poco establecidos por documentos originales. Nos apoyamos especialmente en inventarios del Archivo Histórico de Parral ²⁾, una lista de partidos de 1777 (AGI, Guadalajara,301), en las diferentes guías de forasteros de fines de la Colonia, y algunos estudios historiográficos ³⁾. En el area fronterizo septentrional, tomamos la reorganización de los presidios en 1773 para también redefinir la concepción territorial.